Día Mundial de la Salud Mental Materna
La Legislatura conmemoró este miércoles el “Día Mundial de la Salud Mental Materna” con una actividad encabezada por la diputada Ana María Bou Pérez (VJ).
La ex Ministra de Salud porteña explicó que con actividades como la desarrollada en el Salón Dorado busca aumentar la visibilidad de las posibles dificultades psíquicas que pueden ocasionarse por el embarazo, el parto y el postparto.
El propio cuerpo parlamentario mediante la sanción de una ley en 2019, estableció el “Día Mundial de la Salud Mental Materna” el primer miércoles de mayo de cada año.
La directora ejecutiva de la Asociación Civil Materna, Laura Corton, participó del encuentro y resaltó que la campaña por la salud mental materna es internacional y busca un reconocimiento formal. Detalló que “una de cada cinco sufre un problema y 75% de las que sufren no reciben un tratamiento adecuado”. Destacó que es necesario poner el foco en aquellas que no tienen atención.
A continuación, la especialista Analía Sierra aludió a la necesidad de contención, a pesar de los problemas económicos, a las mujeres que fueron atendidas en hospitales y clínicas. Y luego, hubo un panel integrado por los profesionales Ariel Golubiki -jefe del Departamento Infantil del Ministerio de Salud de la Ciudad-, Violeta Bromberg, Silvina Foks e Ivana Moyano.
Cuidar la salud mental de la madre
Los fundamentos de la ley que instituyó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el “Día de la Salud Mental Materna” explican: “La salud mental de las madres es necesaria para el desarrollo y crecimiento de los hijos. Muchas mujeres sufren y experimentan emociones negativas frente a los numerosos cambios vitales del embarazo y el posparto. El 25% de las embarazadas experimenta algún tipo de malestar psíquico significativo. El estrés y la enfermedad mental materna pueden afectar directamente al feto y al recién nacido con impacto sobre su desarrollo físico, cognitivo y emocional que puede perdurar en el tiempo. La atención y los cuidados hacia la salud mental de la madre proporcionan el apoyo necesario para que las mujeres puedan ampliar sus recursos y capacidades personales, adaptarse mejor a estos desafíos, vincularse afectivamente con su bebé, alimentarlo y cuidarlo. Por eso, cuidar la salud mental de las madres supone mejorar la salud de la sociedad actual y futura”.
Se calcula que una de cada siete mujeres que son madres primerizas experimentan algún trastorno durante el embarazo o el posparto (depresión perinatal, la ansiedad, el trastorno obsesivo compulsivo, la bipolaridad y/o la psicosis posparto).
Además, existen “factores como la enfermedad mental previa personal o familiar, la pobreza, la desnutrición, las infecciones y la violencia también suponen un riesgo añadido”.